Buenas!
Hoy quería poner especial énfasis en nuestras potencialidades como seres humanos. Los grandes avances en la sociedad provienen, en primer lugar, de una visión: de ideas, creadas y desarrolladas en primer lugar en la mente de una o varias personas, y luego plasmada en la realidad a través de acciones, de hechos.
Cuando escribimos, la obra que estamos engendrando tiene su origen en nuestros pensamientos. Éstos pueden provenir de diversas fuentes y ser influidos por infinidad de cosas, cómo quiénes en verdad somos y cómo vemos el mundo, nuestra crianza, nuestros amigos, las circunstancias que la vida nos ha hecho vivir, etc
Pero, yendo al grano, las palabras que salen de nuestras manos (escritas) o por nuestras bocas tienen un inmenso poder. El asunto es que sepamos direccionar esa energía. Si pienso que lo que escribo es poco creativo, o carece de interés para los demás, pues lo más probable es que eso suceda. Debo auto-convencerme que puedo y debo mostrar, a mí mismo en primer lugar, lo mejor que tengo. No es posible alcanzar el éxito pensando en el fracaso. Pero sí es posible concentrarse en nuestros puntos fuertes y dar el máximo de lo que uno puede dar: es enteramente viable lograrlo, ¡créanme!
Cuando escribas, hazlo convencido. Sé paciente, pero cree en tí. No digas cosas negativas en voz alta, hazme caso. A veces cuesta comenzar a creer, pero si día a día te convences que puedes... lo vas a lograr.
PD: No olvides, para nosotros, escribir no debe ser un trabajo, sino una pasión... ¡a disfrutarla entonces!
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