viernes, 27 de enero de 2017

Siempre se puede aprender

En muchas ocasiones nos hacen creer o nos convencemos a nosotros mismos que es tarde.

Pues, si bien del dicho al hecho hay un largo trecho, es nuestro deber desmentir esa negación (porque lo es).

¿Cómo? Fácil: intentándolo sin bajar los brazos. Escuchando menos a aquellos que nos dicen lo que está mal, lo que no debe hacerse, que comentan y piensan todo el tiempo en "lo que dirán los demás".

 Ya he mencionado mucas veces, es fundamental que leamos: los grandes, los nuevos autores, distintos géneros (ficción, terror, etc), poemas, cuentos, novelas y artículos... ¡¡¡¡TODO cuenta!!!!

En particular es fundamental el tomarnos en serio con la regla 50/50, esto es, sí, somos y nos creemos escritores, por ende amamos lo que hacemos, pero... tenemos la suficiente humildad y valentía como para reírnos de nosotros mismos y nuestros errores.

Les puedo contar, en forma personal, que me divierto leyendo mis obras más viejas y descubriendo falencias o incluso, bueno, a veces sorprendiéndome por algún buen pasaje narrativo.

Leo mucho a los maestros de la literatura universal, aunque a veces me doy licencia para aggiornarme con algún libro de algún autor "nuevo" o con gente que nunca antes había prestado atención, aunque conociera quienes eran.

Espero sigan adelante en este viaje. Todo el mundo que escribe, creo, desea ser conocido y que su obra sea leída. Pero no nos preocupemos demasiado en el objetivo, pensemos en el camino que nos lleva a éste. No nos rindamos, creamos en nosotros mismos y trabajemos duro en nuestros sueños. 

Tarde o temprano, los frutos se van a cosechar... 

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